La Federación Costarricense de Fútbol (FCRF) anunció este martes la suspensión por cinco años de toda actividad futbolística a los mexicanos Ernesto de la Torre y Enrique Valencia, así como al costarricense José Rolando Pereira, por su implicación en un intento de amaño de partidos dentro de la Liga de Ascenso de Costa Rica.
Los hechos ocurrieron en febrero pasado, cuando los tres sancionados ocupaban cargos dentro de la Asociación Deportiva Municipal Turrialba, equipo de la segunda división costarricense: De la Torre como dirigente, Valencia como entrenador y Pereira como presidente del club. Según la investigación, los involucrados habrían ofrecido dinero a ocho jugadores del equipo a cambio de perder un partido el 10 de febrero por un marcador específico.
La propuesta fue rechazada de inmediato por los futbolistas, quienes expresaron su indignación y más tarde denunciaron el hecho a través de una aplicación especializada de FIFPro, la organización internacional de futbolistas, creada precisamente para reportar irregularidades como manipulación de partidos. La FIFA recibió la alerta y canalizó el caso hacia la Oficialía de Integridad de Costa Rica, que abrió la investigación correspondiente.
La Comisión Disciplinaria de la FCRF, tras analizar los testimonios y las pruebas recabadas, determinó que los tres implicados eran responsables de tentativa de manipulación de resultados, imponiendo la sanción máxima de cinco años fuera de cualquier actividad relacionada con el fútbol.
En su resolución, la Comisión aclaró que no se sanciona directamente al club Turrialba, pero sí hizo un fuerte llamado de atención a su dirigencia y fiscalía por su “conducta permisiva y omisa en los deberes de prevención y alerta en temas de manipulación de partidos”.
Un aspecto que llamó especialmente la atención fue que, según los testimonios, dos días después del partido en cuestión, los jugadores fueron informados por los implicados de que todo había sido “una prueba de confianza”, un argumento que fue rechazado por la Comisión como intento de justificar un acto claramente sancionable.
Cabe mencionar que De la Torre y Valencia apenas se habían integrado al equipo el día anterior al partido, como parte de un convenio entre la institución deportiva y una empresa externa. Ahora, con esta sanción, quedan inhabilitados para desempeñar cualquier función en el ámbito futbolístico tanto en Costa Rica como a nivel internacional, mientras que aún tienen tres días hábiles para presentar una apelación ante las autoridades correspondientes.
Este caso pone en evidencia la importancia de los mecanismos de denuncia y vigilancia implementados en el fútbol internacional, y refuerza la necesidad de mantener altos estándares de ética y transparencia en todas las divisiones del deporte.